Al pasear por sus calles podrás observar las huellas que aún perduran de los 3 imperios de los cuales la ciudad fue capital: Romano, Bizantino y Otomano. Además, encontrarás rastros del pasado que hacen de Estambul una ciudad con un extenso legado histórico.
Actualmente, es una cosmopolita llena de modernidad que, al mismo tiempo, conserva la tradición de sus ancestros. Pasear por aquellos sitios turísticos que guarda puede ser una lección bien establecida de historia, alternando la diversión, el entretenimiento y una cultura apasionante.
Hablar de Estambul no es sencillo, pues corremos el riesgo de no mencionar cada una de sus caras e historias que hacen de la ciudad un magnifico monumento a lo atractivo del turismo. No se trata de una, sino muchas, pero es por encima de todo un lugar único desde donde mirar 2 continentes al mismo tiempo. Se trata de una ciudad con belleza arrebatadora y un punto en el que resulta sencillo detenerse por un momento e imaginar cómo sucedió la historia.
Aquí te dejamos las atracciones turísticas más solicitadas por los turistas, todas guardan secretos y detalles que te van a dejar con la boca abierta tan solo de ver su exterior.
Considerado el sitio más visitado de Estambul. Tiene un gran valor histórico desde el punto de vista cultural, histórico y arquitectónico.
El edificio fue utilizado como basílica desde su construcción hasta la conquista de Constantinopla por parte del Imperio Otomano en 1453. A partir de ese momento, el sultán Mehmet II ordenó la conversión de Santa Sofía en mezquita, y de este modo, la antigua basílica, se convirtió en la primera mezquita imperial de Constantinopla. Ya en 1931, Mustafa Kemal Atatürk ordenó su restauración y la convirtió en un museo en 1935.
El museo está abierto al público todos los días excepto los lunes. Te recomendamos llegar lo más pronto posible del día para que evites las filas largas de la entrada.
La Mezquita de Sultanahmet, mejor conocida como Mezquita Azul, es la más grande e impresionante de todas las mezquitas de la ciudad. Se encuentra situada a pocos metros del museo de Santa Sofía, de la que la separa un jardín, y cerca del palacio de Topkapı y del Hipódromo.
La Mezquita Azul cuenta con seis minaretes lo que, en el momento de su construcción, provocó mucha polémica, ya que la Meca también tenía seis. Posteriormente y para apaciguar a los fieles, en la Meca se construyó un séptimo minarete para marcar la diferencia.
Lo más apropiado para entrar a esta mezquita es sin zapatos y las mujeres deben llevar el cabello cubierto. La entrada es gratuita.
El Hipódromo Romano de Estambul es un lugar histórico en ruinas, del cual se conservan algunos vestigios que explican lo que fue de este lugar, definiendo así la historia de la ciudad.
El Hipódromo fue construido en el año 200 por Séptimo Severo, aunque fue Constantino el Grande, fundador de la ciudad, quien lo amplió y lo embelleció. Sirvió como centro neurálgico para la diversión y el ocio de la gente en Constantinopla, puesto que en su interior se realizaban carreras de carros y circos.
En la actualidad, solo quedan algunas columnas y vestigios, aunque lo suficientemente importantes como para hablar a favor del grandioso recinto.
La Torre de Gálata es uno de los monumentos más emblemáticos de la ciudad de Estambul, considerada también como uno de los símbolos de esta grandiosa ciudad.
Construida por el emperador Anastasius en el año 507, y se utilizaba como faro. En el 1348, la reconstruyeron en piedra y la bautizaron Torre de Cristo. En el siglo XV, durante el Imperio otomano, la torre se utilizaba como depósito y calabozo y, en el siglo XVI, como torre de vigilancia de incendios. La torre fue dañada durante un incendio, en 1832, y fue reconstruida por Mahmut II.
Subir a la torre significa obtener las mejores vistas de Estambul y si buscas una experiencia diferente, en las noches encontrarás cenas disponibles con espectáculos y barra libre.
El Palacio de Dolmabahçe se encuentra en la orilla europea del Bósforo. Se trata de un palacio de estilo neo-barroco que fue mandado por el sultán Abdulmecit I en el año 1842, la finalización del edificio terminó en 1853.
Con una fachada de más de 600 metros y una superficie de 15,000 metros cuadrados, el Palacio Dolmabahçe es el edificio más grande del país. Tiene 285 habitaciones, 43 salas, 68 lavabos y 6 baños turcos. En 1984 el palacio fue convertido en museo.
Lo encontrarás abierto de martes a domingo de las 9 am a las 4 pm. El precio de la entrada es de, aproximadamente, 60 liras.
Considerada el corazón de la moderna Estambul, la Plaza Taksim está situada en la parte europea de la ciudad, en un importante distrito comercial, turístico y de ocio conocido por sus restaurantes, tiendas y hoteles. De la plaza surge una de las principales arterias comerciales de la ciudad, Istiklal Caddesi (Avenida de la Independencia), una agradable calle peatonal que se puede recorrer utilizando el tranvía nostálgico, que llega hasta la estación del Funicular de Tünel.
El nombre de la plaza, Taksim, significa "distribución" en turco, y le fue dado debido a que era el lugar en el que se centralizaba la distribución de agua de la ciudad desde 1732. Hasta principios del siglo XX el lugar componía el extremo norte de la ciudad pero con la ampliación de ésta se convirtió en el corazón del nuevo Estambul.
Actualmente Estambul es una de las ciudades más turísticas de Europa y cada año es visitada por millones de personas. Sé parte de una de las experiencias más exóticas de Turquía y visita estos sitios turísticos a través de recorridos especializados, algunos con guía en español, que te sumergirán en el ambiente histórico y cultural de 2 continentes dividido por el estrecho de Bósforo. Encuentra experiencias en este enlace y sorpréndete de las diferentes opciones que tienes para vacacionar en Estambul.